Hace apenas tres días, unos vecinos de la ciudad de Madrid, han encontrado en un edificio abandonado algo sorprendente... No es la primera vez que se encuentra en la capital algo de este calibre. Al parecer mientras que Teresa y José paseaban por los alrededores de este edificio, un ruido inquietante les llamó la atención, parece ser que provenía de una de las ventanas que daba a la calle. Ambos asustados, se preguntan si habrá alguien encerrado o algún animal herido dentro... Por ello, con mucho temor pero armados de valentía deciden adentrarse en el tenebroso edificio, del cual se rumoreaba que hace muchos años había sido un hospital. A Teresa que le daban mucho miedo los hospitales parecía no terminar de convencerle la idea... Por lo que José la pregunto... ¿Vienes o te vas a quedar ahí sin saber qué ocurre aquí dentro?. Ella asustada decide entrar ya que tiene una gran intriga por saber que estará pasando. La cosa no está fácil, se las tendrán que ingeniar muy bien para poder llegar a colarse por la ventana y teniendo mucho cuidado de que no les vea nadie, ya que está prohibido adentrarse en el edificio. Tras varios intentos consiguen colarse dentro del antiguo hospital, donde todavía quedaban algunas camillas antiguas. Pero... ¡Ay! Otro ruido sospechoso les pone el vello de punta, pero al parecer había sido un pájaro que se había colado en la habitación. Teresa que estaba muy pendiente de todo, vio debajo de la camilla una especie de caja. Esta tenía un aspecto muy deteriorado, muchos agujeros, algunas manchas de agua... Además era muy grande, dura y áspera, pero pesaba muy poco. José no quería abrirla pero Teresa que era un poco cabezota, decidió ver que había dentro... Teresa quedó pactada... No se imaginaba que allí dentro pudiera encontrar algo como eso... Al parecer dentro de la caja había: una muñeca que si girabas una llave que tenía en la espalda sonaba una canción y una llave muy antigua, junto con una carta, donde se podía leer perfectamente... "Querida amada mía. Esta es la llave que abre mi corazón, espero poder ser correspondido, como ya sabes, estoy bastante enfermo y me trasladan a otro hospital. Mañana cuando vengas a visitarme ya me habrán llevado de aquí, pero quiero que sepas que te esperaré por siempre..." Teresa con lágrimas en los ojos, vio que esa carta tan bella nunca había sido abierta... Que ese amor nunca fue correspondido y que todos los bienes de ese buen hombre estaban dentro de esa caja. Tras descubrir que los ruidos venían de aquella caja, decidieron dejarlo todo como estaba y salir de allí antes de que les pudiera ver alguien.
Espero que te haya gustado mi noticia Lucía. Y... ¡Espero verte muy pronto por aquí!
